Por todos es conocido que cada día se utilizan más las terapias con animales. En algunos casos como complemente a un tratamiento medicinal tradicional, y en otros cuando la medicina habitual no da más de sí.
Son muchos y muy variados los beneficios que la interacción con un animal puede proporcior a una persona enferma (tomando como evidentes los beneficios que para cualquier persona sin problemas de salud tiene). Estos beneficios son de muy diversa índole; van desde la mejora de la motrocidad hasta la mejora del autoestima pasando por la compañía y el cariño que estos animales nos proporcionan. Es decir, este tipo de terapias proporciona beneficios físicos y psiquicos; incluso educativos y emocionales. Además se utilizan tanto con personas mayores, como con niños. Los animales utilizados son muchos, desde los más tradicionales, como perros y gatos, hasta otros menos convencionales como delfines.
(En estas páginas podréisinformaros un poco más: http://mascotas.facilisimo.com/reportajes/consejos-sobre-mascotas/terapias-con-animales/terapia-asistida-por-animales-la-mejor-medicina_185922.html; http://www.enbuenasmanos.com/articulos/muestra.asp?art=183)
Y yo me pregunto, ¿qué más podemos pedirles a nuestras mascotas?, los beneficios que nos proporcionan tanto a personas enfermas como a las que no lo están son inumerables.
Yo desde mi experiencia y habiendo convivido durante muchos años con una persona enferma diré que puede que en muchos casos mi perro fuera una forma de terapia. Su compañía, su cariño...incluso le hacía reír en muchas ocasiones.Por eso me gustaría deciros que ante un problema de salud de una persona que convive con nosotros no tenemos que abandonar a nuestra mascota, pues puede ser de gran ayuda para todos.
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